REPARADORES DE MUROS CAÍDOS

REPARADORES DE MUROS CAÍDOS

NO a todo tipo de discriminación

Somos respetuosos del ser humano, sea cual sea su condición social, cultural, intelectual, raza, color de piel, religión, elección y opción en su vida de relaciones, su actividad sexual, su contexto de vida, su pasado, su presente y su futuro.

No estamos puestos en la Tierra para ser jueces, facistas, legalistas, hipócritas,tiranos. Dios nos ama tal cual como somos.

En la peor de las condiciones de la Humanidad Jesucristo fue a la Cruz para que esa condición fuera revertida ante el Creador.

No nos metemos con la opinión de otros Grupos, Blogs, Páginas, que enfaticen en sus posturas pro- o contra algo.

Desde aquí damos información y nuestro concepto basado en la vida con Dios, las experiencias y testimonios publicados. Quien quiera entrar, ver, dejar su comentario está en su derecho. Deseamos no ser atacados, agredidos por Grupos, personas individuales, Asociaciones que no piensan como Reparadores de muros caídos. No encontrarán en el Blog, ninguna afrenta a quienes no piensan igual que nosotros. Gracias.







29/4/11

La angustia de NO pecar. 1

La angustia de NO pecar.

Cuando se está frente al objeto deseado, aunque quizá no se lo estuvo deseando, pero aparece como por arte de una mala magia, todos los radares se ponen en funcionamiento, las voces anuncian la posibilidad de capturar la presa (para cada uno será una distinta obviamente: mujer-hombre-pornografía-voyerismo-exhibicionismo,etc
Cuando se está lo suficientemente distraído en el cuidado de la sobriedad y en la relación con la persona que verdaderamente se quiere llegar a ser. Cuando se olvidan casi absolutamente los votos y promesas hechos en momentos posteriores a las caídas de las que no se quiere ni siquiera recordar se es preso de la misma situación que una y otra vez llevó al adicto al consumo y la cadena vuelve a enlazarse con el eslabón de la rutina de la satisfacción.

El movimiento almático, conjuntamente con la adrenalina que produce estar al borde del abismo del consumo de la presa a consumir hace que no se sienta ninguna otra sensación, ni conciencia, ni temor, ni recuerdo, ni dolor, ni ubicación de quién se es. Es un momento absolutamente indescriptible, es casi como el momento preciso del orgasmo, de la eyaculación donde parece que el mundo no existe y solo es el correr de la energía a través del cuerpo como si fuera que un rayo traspasa mente, cuerpo y llega a la tierra, aunque la sensación es de volar, la realidad es que ese rayo fulminante clava al adicto en la tierra y lo destruye en ese mismo segundo en que decide, o mejor dicho, no decide, sino que se deja llevar por el instinto-impulso-ansiedad-excitación-etc.

Cuando un cristiano entiende lo que significa negarse a sí mismo, tomar la cruz y seguir a Cristo su Maestro, su Salvador, su Pastor, deberá resolver cómo vivirá desde el momento en que comprende esta impresionante explicación previa a tomar el Camino de Cristo. Él advierte claramente que el costo es TOTAL.
Lamentablemente, nos acercamos al Camino por muchas razones, y aún pudiera ser la necesidad de un cambio de vida en cuanto a la sexualidad desordenada, pero la determinación de obedecer-acatar-implementar-intentar vivir ese axioma. (Un axioma es una premisa que se considera «evidente» y es aceptada sin requerir una demostración previa).
El cristiano debe ser lo suficientemente valiente-honesto-realista, como para iniciar el Camino con Cristo. Poder decir que se es una nueva criatura tiene un significado muy alto y no es fácilmente comprendido.

Cuando pensamos o pasamos por los sentimientos de haber pecado, (porque el Espíritu que Dios puso en el creyente: redarguye-provoca casi un dolor físico, generalmente a la altura del estómago), nos damos cuenta que ese sentimiento o estado es la angustia, ese estado de desesperación que nos hace sentir que ya no se puede mas y que podemos doblarnos en dos por el dolor que se mimetizan entre el espíritu humano, el Espíritu Santo y la mente-corazón que están gritando y sollozando porque en ese interior, donde Dios puso Su presencia, fue albergado un PECADO, y éste fue DELIBERADO.

No debemos, no podemos creer o pretender creer, o hacer creerle al Señor que hemos pecado porque fuimos engañados. Eso es una mentira que nadie va a creer, se peca por decisión propia.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Holla su espacio online es muy bueno,esto es la tercera vez que vi tu website, buen espacio!
abrazo

reparadores de muros caidos dijo...

gracias por tus comentarios